“Año de la unidad, la paz y el desarrollo”
“Año de la unidad, la paz y el desarrollo”
Volver a contar la historia de España, pero con la particularidad de hacerlo, en tiempos de masificación turística, a través de sus restos patrimoniales. Es una manera de desafiar los ritmos que imponen las visitas fugaces a edificios y lugares y ruinas del pasado y aceptar el reto de servirse de esa inmensa riqueza para acercarse con una conciencia crítica a cuanto ha ocurrido en este país desde las fechas más remotas. La Unesco ha reconocido en España 50 sitios como Patrimonio Mundial, de los que 43 son históricos, cuatro son naturales y otros tres, mixtos. Eduardo Manzano Moreno (Madrid, 1960), profesor de investigación en el Instituto de Historia del CSIC y uno de los grandes conocedores de al-Andalus y del mundo medieval, acaba de publicar España monumental. Una historia a través del patrimonio (Crítica), un libro con abundantes fotografías y en el que a través de esos 46 lugares reconocidos por la Unesco explora el pasado y sortea así la tentación de volver atrás con el fardo de una mirada identitaria. Ya en España diversa, su anterior libro, mostró la variedad cultural, religiosa, étnica o lingüística de las gentes que a lo largo del tiempo vivieron en España. Esta vez lo hace a través de las huellas que esa diversidad ha dejado en su patrimonio. El historiador comenta aquí 14 de esos lugares llenos de historia.
España monumental. Una historia a través del patrimonioEduardo Manzano Moreno Crítica, 2025 389 páginas, 25,55 euros Coordinación:Guiomar del Ser
Edición gráfica:Beatriz Palomo
“Buster ha estado conmigo y siempre lo estará”, reconoce Johnny Knoxville en el documental de Peter Bogdanovich El gran Buster, que este mes reestrena el canal Historia y vida, unos días antes del 130 aniversario de su nacimiento. A priori, no parece que el actor, alma de la gamberrísima Jackass, tenga mucho que ver con la estrella del cine mudo Buster Keaton (Kansas, 1895- Los Ángeles,1966), pero Knoxville le señala como una de sus principales referencias y confiesa que una de las secuencias de Jackass en la que más cerca estuvo de morir fue la que emulaba la célebre caída de la fachada de El maquinista de la general (1926).
Estar a la altura de los padres a veces es un reto. Para el hijo de la cantante María Jiménez, dueña de una carrera colosal desde mediados de los años setenta y de cuyo fallecimiento se acaban de cumplir los dos años, uno muy exigente. Alejandro Jiménez, fruto del matrimonio de la artista con el actor Pepe Sancho —con quien se casó dos veces y a quien denunció por malos tratos—, honra la memoria de su madre cuidando de su legado. Desde su casa de Chiclana —que fue de la artista y en la que él reside desde hace un año—, y con la ayuda de su esposa, gestiona los recuerdos que conserva de ella, además de su página web (mariajimenezoficial.com) y la cuenta de Instagram (@mariajimenezoficial), con cerca de 77.000 seguidores.
Un caballo blanco galopa con serena gallardía por un paisaje de matorrales calcinados. Un puñado de cuatro casquillos de fusil y otro más pequeño de pistola dan testimonio de los cuatro disparos que hirieron de muerte a uno de los ejecutados el 27 de septiembre de 1975, y del tiro de gracia que lo remató. En las películas los disparos suelen tener una irrealidad abstracta, como de descargas eléctricas sin huella. Quien ha manejado alguna vez un fusil es consciente de su tamaño y su peso como de herramienta primitiva, y ha tocado el peso y la forma afilada de las balas, y puede imaginar su efecto sobre una materia tan frágil como la carne y los huesos humanos. Al recibir la descarga unánime de los disparos, la cabeza de Ángel Otaegui, otro de los ejecutados, voló como una pelota a una distancia de dos metros.
En agosto de 2024 unos trabajadores del centro Cometa ―el que hace el seguimiento de los dispositivos antimaltratadores― grabaron un vídeo en el que se muestra cómo en solo 11 segundos un agresor podía desconectar la pulsera. En el clip se ve que el usuario tiene la posibilidad de gestionar permisos para vincularse a dispositivos cercanos. Es decir, para tener el móvil conectado, o no, al brazalete que llevan en la muñeca, sin que saltara ninguna señal. Sin pulsera y dispositivo vinculados, y sin alerta en el sistema, podía moverse por donde quisiera. En marzo de 2025, el acta de una reunión entre la plantilla de ese centro, Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género y adjudicatarias (Vodafone y Securitas) refleja que eso, siete meses después, seguía siendo posible.
Alrededor de medio centenar de incidenciasDesde el 17 de septiembre, este diario ha tenido constancia a través de múltiple documentación de alrededor de medio centenar de incidencias desde que comenzó el servicio con las últimas adjudicatarias, Vodafone y Securitas, y al menos durante un año y medio. Y no han afectado solo a los dispositivos, han sido múltiples y en diversas áreas. Desde fallos en el funcionamiento del centro, en la gestión de los recursos humanos, la plataforma con la que trabajan y los dispositivos.
Entre ellas hay errores en los posicionamientos, a veces de kilómetros; aparatos que emiten alertas sin motivo y otros que no saltan a pesar de que el agresor haya entrado en la zona de exclusión fijada; órdenes dadas por superiores a los técnicos que no pueden hacerse por protocolo como cerrar alertas sin seguir el procedimiento; falta de personal tanto en la sala de control como en el equipo de campo, el que se ocupa de instalar, desinstalar y mantener y revisar los dispositivos.
También carencia de material en momentos puntuales, o falta de formación tanto en el sistema con el que trabajan como con los dispositivos o en el ámbito en el que esto se enmarca, la violencia de género y la sexual.
En medio de su trabajoso proceso de seducción a Xabi Alonso, Vinicius visita este sábado (16.15, Dazn) uno de los escenarios que le recibe con mayor inquina, contra uno de su rivales más esquivos. “Esperamos un ambiente potente”, dijo este viernes el entrenador del Real Madrid. El brasileño ha jugado seis veces en el Metropolitano y nunca ha marcado. La última, en marzo, falló un penalti en la vuelta de octavos de la Champions. Solo lleva un gol contra el Atlético en 17 partidos, en 2023, horas después de que apareciera un muñeco hinchable con su camiseta ahorcado en un puente. Por aquello condenaron en junio cuatro ultras rojiblancos a penas de entre 14 y 22 meses de cárcel.
Este viernes comenzó en Madrid un fin de semana único para los fans y seguidores del videojuego competitivo League of Legends (LoL), rey de los eSports. Las finales europeas de este popular videojuego de batallas por equipos se celebran en la ciudad y pondrán a prueba a cuatro equipos: G2 Esports, Fnatic, Karmine Corp y el representante local, Movistar KOI. Con una comunidad de jugadores que supera los cien millones en todo el mundo, League of Legends es un videojuego multijugador de batallas online. Pero es mucho más. Es una forma de vida para millones de fans, muchos de los cuales viajarán a Madrid para participar en las diversas actividades repartidas por la ciudad. Aunque es ampliamente conocido, gran parte del público desconoce su complejidad y la dedicación que requiere a nivel competitivo. Aquí van algunas claves:
En 1989 al mánager de Tina Turner, Ray David, conductor también de las carreras de Olivia Newton-John, Cher, Janet Jackson, Joe Cocker, Sade o Pink le costó que Peter Lindbergh, entonces uno de los fotógrafos más cotizados del mundo, le cogiese el teléfono. Así se deduce de una de las cartas originales que recoge el libro de Taschen Tina Turner by Peter Lindbergh, que recopila las mejores imágenes (hojas de contacto incluidas) de todas las memorables sesiones de fotos que finalmente sí se produjeron. Lindbergh contestó con una nota manuscrita, llena de sentencias parsimoniosas, donde solo al final, en una posdata traviesa, acaba aceptando el encargo de hacer un reportaje en París con la que para entonces ya era una estrella mundial del pop y del rock de nuevo.
El miedo y la alarma que genera el uso de la IA y los chatbots por parte de jóvenes y adolescentes va de la mano de los riesgos que conlleva. A finales de agosto, los padres de Adam Raine, un adolescente de 16 años que se quitó la vida en abril en Estados Unidos, demandaron a ChatGPT por ayudarle a “explorar métodos de suicidio”. Un informe de la ONG Center for Countering Digital Hate (CCDH), por su parte, alertó de los fallos de seguridad y de cómo ChatGPT “traiciona a los adolescentes vulnerables al fomentar conductas peligrosas”. En solo dos minutos, cita el informe, ChatGPT recomendó cómo cortarse “de manera segura” (es decir, instrucciones para autolesionarse con la menor posibilidad de detección). En 40 proporcionó una lista de pastillas para sobredosis e incluso generó un plan completo para suicidarse, incluyendo cartas de despedidas para familiares. En el caso de una adolescente con trastorno de conducta de alimentación, tardó 20 minutos en crear planes de dietas peligrosamente restrictivos. También crece entre la población en general el uso de ChatGPT como psicólogo y los expertos han alertado de que puede reforzar el egocentrismo y las ideas paranoides.
Aparece algo cansada tras un largo día de rodaje con Nike, pero le encantar hablar. Sobre todo, de lo que no es fútbol. Francisca “Kika” Nazareth (Lisboa, 22 años), cercana, sonriente y con un carisma atípico, pide a la periodista que se siente a su lado en el sofá de piel. El verano pasado aterrizó en el FC Barcelona como uno de los fichajes más caros de la historia del club tras convertirse en una de las grandes promesas europeas. Representada por Jorge Mendes, referente en Portugal y capaz de jugar en cualquier posición ofensiva, Kika llegó al Barça con una sonrisa que se esfumó en marzo: se rompió el ligamento lateral interno del tobillo, pasó por quirófano, se perdió la temporada y también la final de la Champions en su Lisboa natal. “Allí era todo fútbol”, recuerda sobre su infancia entre la calle y el fútbol sala antes de debutar en el Benfica. “No sabía que quería ser futbolista. A los 16 años me enteré de que esto era real”, añade. Esta segunda temporada, con dos goles y tres asistencias en 100 minutos, quiere que sea, por fin, su año. “Estar en el Barça significa que es obligatorio pensar que podemos ganar los cuatro títulos”, confiesa.
El presidente de Argentina, Javier Milei, ha regresado de Nueva York con mucho más de lo que había ido a buscar, en un momento en el que su país parece acercarse de nuevo al abismo económico y él, al político. Milei volvió con la promesa del presidente estadounidense de un inédito paquete de apoyo: 20.000 millones de dólares, una línea de crédito sin detallar y hasta la posibilidad de que Washington compre deuda argentina. Se trata de un rescate por parte del líder de la gran potencia mundial que esconde no pocos riesgos.
Después de cinco atentados fallidos en años previos, el zar Alejandro II fue asesinado en 1881 en San Petersburgo. Su magnicidio, callejero y complejo, dejó para la historia de la violencia europea una triste y doble marca: la de ser un temprano caso de terrorismo suicida y la de hacer entrar en el vocabulario de muchas lenguas occidentales la palabra pogrom. Culpados por haber instigado el asesinato, los judíos de Rusia sufrieron durante meses acoso y persecuciones. La palabra rusa pogrom, que significa “destrucción”, “devastación”, sirvió para dar nombre a ese hostigamiento y se fue difundiendo a través de los medios. En español empieza a circular desde inicios del siglo XX bajo las formas pogrom, pogromo (con plural pogromos) e incluso, con una errónea consonante intrusa, progromo. Por ser una voz novedosa, los periodistas que la usaban en sus crónicas la explicaban a los lectores a renglón seguido: pogrom o acometida antijudía.
Durante la apertura anual de la Asamblea General de la ONU, el encuentro más llamativo fue, sin duda, el protagonizado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
Durante mucho tiempo, una de las preguntas que más repetía a mi hijo Darío, de ocho años (diagnosticado de TEA grado 1), al recogerle del cole era con quién había jugado en el patio ese día. Este inicio de curso, en cambio, no siento ya la necesidad de hacerlo, al darme cuenta de que ese tema no es para él una prioridad, sino una autoexigencia más a sus espaldas. Darío, con su madurez, nos ha hecho entender que tiene una “batería social” que se agota rápidamente y que necesita dosificar sus energías para no colapsar. El patio es un buen momento para desconectar del ritmo frenético de las clases, y necesita a veces estar solo a modo de autorregulación. Ahora sé que lo que precisa un niño neurodivergente para estar bien en el cole es principalmente que sus compañeros respeten su espacio y acepten sus diferencias. Por este motivo, cada vez que le recojo me basta con un simple “qué tal estás” para garantizar que ha estado a gusto. Y siento que así le estoy ganando la partida a los imperativos sociales que se empeñan en afirmar que todos los niños tienen las mismas necesidades.
Primero marcaron el suelo con cinta de carrocero y después rellenaron las franjas con sprays de tiza negro, blanco, verde y rojo. Los padres que la organizaron llamaron a la iniciativa Pintemos por los niños de Gaza, pero su fruto, una bandera palestina coloreada por los niños del Pi i Margall a las puertas de su colegio, duró apenas unas horas: al día siguiente, mientras los críos estaban en clase, el Ayuntamiento de Madrid mandó a su Servicio de Limpieza Urgente (Selur) para borrarla.
Rhzala El Mazouki es una de las 11.500 marroquíes contratadas en origen para trabajar en la recogida de la fresa de Huelva. Lleva 16 años cruzando el Estrecho, pero esta ha sido la primera campaña en la que, cuando se agachaba junto a los lomos de frutos rojos bajo los invernaderos, no pensaba solo en que el esfuerzo se circunscribiría a poder acumular dinero suficiente para ayudar a mantener a su familia. Esta vez lo ha hecho con el firme propósito de destinar sus ahorros a ampliar el obrador de pan y dulces que ha empezado a regentar en el último año y a que su hija termine los estudios en hostelería y pueda sumarse a su negocio.
El paro, la sanidad y la vivienda son los tres problemas que más preocupan a los andaluces, según la Fundación Centro de Estudios Andaluces (Centra), el CIS andaluz. La comunidad es la segunda que más desempleo juvenil tiene de España, con una tasa del 25,27%, casi 13 puntos por encima de la media nacional; tiene un millón de pacientes en lista de espera sanitaria y es el territorio donde más ha crecido el precio de la vivienda en el último año. Sin embargo, ninguna de estos asuntos -salvo la del alquiler, y de manera tangencial- se contemplan en el paquete de rebajas fiscales que el Gobierno andaluz ha ido desgranando a lo largo de esta semana: desgravaciones para dueños de mascotas, para usuarios de gimnasios y de clubes y federaciones deportivas y una ampliación de las ayudas al alquiler a jóvenes, mayores de 65 años y discapacitados. Un ahorro de 55 millones en total del que se beneficia solo el 2%, el 9%y el 0,4% de toda la población, respectivamente. Las prioridades que el barón popular se ha fijado en su séptima bajada de impuestos, y en plena batalla con el Gobierno central por la infrafinanciación y la renuncia a la quita de la deuda, pueden parecer superficiales e incluso innecesarias, en general, pero esconden una clara intención electoral por retener a ese votante de centro izquierda que le dio la mayoría absoluta en 2022 y que es el que puede garantizarle no perderla ante el avance de Vox por el flanco derecho.
“Estamos acostumbrados a convivir con los piojos todo el año”. Mercedes Ruiz, directora de un colegio de Sevilla, verbaliza lo que para la mayoría de familias de España es una realidad que sufren en silencio. En pleno siglo XXI la pediculosis —infestación por huevos o larvas de piojos— sigue viviéndose como un estigma asociado erróneamente al hacinamiento y la falta de higiene, e incluso como una infestación que avergüenza y de la que, por eso mismo, no se alerta, favoreciendo así su expansión, no solo en los colegios sino en el resto del núcleo familiar.