“Año de la unidad, la paz y el desarrollo”
“Año de la unidad, la paz y el desarrollo”
La mejora en la calificación de España por parte de las tres principales agencias de rating (Moody’s, Fitch y S&P) supone una buena noticia que confirma el momento positivo que atraviesa la economía, especialmente si se compara con la debilidad de su entorno. Desde el final de la pandemia, los países del sur de Europa, tan denostados y penalizados durante la crisis financiera, han superado al resto de la eurozona, con España a la cabeza, y están capeando mejor que otros países las numerosas amenazas externas que se ciñen sobre la economía del bloque, en forma de aranceles de Estados Unidos y competencia china.
La reciente decisión del Giro de Emilia, en Italia, de dejar fuera de la carrera al equipo Israel Premier-Tech demuestra que el argumento empleado por la organización de la Vuelta a España, de que solo la Unión Ciclista Internacional podía expulsarle de la competición, era falso. Lo lógico, como ha sucedido en el Giro de Emilia, es que se pueda excluir a cualquier equipo por “razones de seguridad pública”. Pero la dirección de la Vuelta no solo no fue capaz de evitar la participación del equipo, colaborando así en el lavado de imagen de Israel, sino que su torpeza incluso les llevó a enfrentar a los ciclistas con una gran parte del público que seguía las etapas, al culpar a los espectadores de poner en peligro al pelotón, cuando era responsabilidad de la propia organización la seguridad de los corredores. Quizás porque sí se podía, pero no se quería evitar la presencia del equipo israelí en la Vuelta, Isabel Díaz Ayuso, defensora ferviente del Gobierno de Benjamín Netanyahu, ha premiado a la competición con la medalla de oro de la Comunidad de Madrid.
Últimas noticias sobre el ADN: crean óvulos humanos fecundables a partir de células de la piel. Un estudio preliminar abre la puerta a que mujeres infértiles y parejas homosexuales tengan hijos con carga genética propia. Durante siglos, la sangre ha funcionado como metáfora de pertenencia. “De mi sangre” se dice, a menudo con voz ronca, para nombrar al hijo; “romper la sangre”, gritando en la puerta de un cementerio, para señalar la traición. El ADN heredó esa carga simbólica: la ciencia lo convirtió en garantía de identidad. La vida sobrepasa luego lo genético: el idioma aprendido, los gestos que imitamos de otros, la suerte. Gemelos idénticos acaban siendo universos distintos; extraños sin parentesco se reconocen ruidosamente como hermanos. Conocer la información genética de un niño puede anticipar riesgos médicos y permite diseñar mejores tratamientos.
Terminé muy pronto una gestión y me quedaba una hora larga hasta mi cita. Como estaba al lado del barrio donde vivió mi abuelo hace un siglo, me puse a callejear. Hacía más de 10 años que no lo pisaba, y a esos sitios hay que volver de vez en cuando, en terapia proustiana, por si te viene una epifanía de las que te arreglan el mes.
Proliferan desde hace años en ciudades de toda España. Edificios clónicos característicos por sus franjas blancas y negras. Los hay en centros y periferias. Anchos y en altura. A precios asequibles o de lujo. ¿Ejemplos? La operación Garellano en Bilbao. El barrio de Valdebebas en Madrid. Lezkariu en Pamplona. O Turianova en Valencia. Son las cebras o bloques cebra, un modelo de edificio que recibe furibundas críticas entre algunos arquitectos: alertan de que no pone en valor el oficio, no es sostenible, se cierra en sí mismo, no hace ciudad y tiene un impacto tremendo en el paisaje urbano. Las mismas voces reparten responsabilidades sobre su proliferación y señalan a promotoras, ayuntamientos, compradores o los propios arquitectos y sus colegios profesionales. Los promotores responden que es un producto que los clientes valoran y funciona, mientras el consejo de Colegios de Arquitectos conviene que el tiempo dirá cuál es el alcance del fenómeno y apuesta por “una arquitectura de calidad que se adapte al entorno”.
El Partido Popular sopesa llevar al Gobierno ante el Tribunal Constitucional a través del Senado por no presentar en tiempo y forma los Presupuestos Generales del Estado. Los populares estudian que la Cámara alta, que controlan con su mayoría absoluta, presente un conflicto de atribuciones contra el Ejecutivo ante el tribunal de garantías. La vía, algo alambicada pero que defienden expertos jurídicos próximos al PP, consistiría en que el Senado acusara al Gobierno de hurtarle la posibilidad de debatir y aprobar las cuentas públicas por no presentarlas, en caso de que finalmente no lo haga.
El cambio ha sido abrupto. Durante años, pedir asilo en España ha sido el único salvavidas al que decenas de miles de inmigrantes se han aferrado para empezar una nueva vida, una fórmula que les permitía vivir y trabajar de forma legal meses e incluso años y enganchar después con otro permiso. Pero ahora la puerta se ha cerrado de golpe para buena parte de los solicitantes y las peticiones han caído un 13%, el primer descenso desde la pandemia. En el caso de colombianos y peruanos, dos de las nacionalidades que más piden asilo en España, el desplome es del 60%. Tras estos números está el nuevo reglamento de extranjería en el que se introdujeron trabas para frenar abusos, pero que, a la vez, está empujando a miles de inmigrantes a la clandestinidad.
El primer menor migrante que iba a ser trasladado de Canarias a la Península ya no viajará a Extremadura como estaba planeado. A solo unas horas de comprarle el billete, los resultados de la prueba de determinación de la edad a la que se somete a los jóvenes migrantes han determinado que el chico tiene más de 19 años. Llegará probablemente a la Península, pero lo hará en el circuito que siguen los adultos migrantes. Y así se frustra el primer traslado de un menor desde las islas, el hito que persiguen desde hace casi dos años tanto el presidente canario, Fernando Clavijo, como el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres. El caso, según fuentes que participan en este proceso de reubicación, expone las debilidades del procedimiento. “Es un desastre. Es imposible hacer esto bien en 15 días naturales [el plazo que impone la ley para los recién llegados]”, lamentan.
Un informe de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) sobre dos contratos adjudicados por la empresa pública Red.es al empresario Juan Carlos Barrabés irrumpió este lunes en la escena política. El documento, firmado por un perito de ese órgano dependiente del Ministerio de Hacienda, advierte de “irregularidades” en esos trabajos encargados a Barrabés, un empresario al que se investiga en el caso Begoña Gómez por su relación con la esposa del presidente del Gobierno. Aunque el informe ha salido a la luz después de que se incorporara al sumario del caso que instruye el juez de Madrid Juan Carlos Peinado, el análisis de esos dos contratos lo pidió la Fiscalía Europea, a quien el magistrado cedió en junio de 2024 la parte del caso que supuestamente afectaba a proyectos financiados con fondos europeos.
“La Transición en Euskadi terminó en 2011, con el final del terrorismo de ETA, 30 años después que en España. Pese a su trascendencia histórica, su final no ha sido reconocido como se merecía. El Congreso no ha celebrado ningún acto institucional por ello”. Lo dice Jesús Eguiguren (Aizarna, Gipuzkoa, 71 años), figura clave en el fin del terrorismo etarra como negociador del Gobierno de Zapatero. Lo hace en sus memorias, donde recorre su trayectoria de la muerte de Franco hasta su retirada al finalizar el terrorismo. Siempre en Euskadi, en el PSE y desde muy joven con responsabilidades políticas, de presidente del Parlamento vasco a presidente del PSE. Con Ramón Jáuregui es el principal ideólogo vivo del socialismo vasco.
Más Madrid ha registrado en el tribunal contencioso-administrativo número 27 de Madrid una demanda en la que reclama la anulación de la licencia que avala la celebración del gran premio de Fórmula 1 de Madrid, que se celebrará cada septiembre en la capital entre 2026 y 2035. El escrito, al que accedió EL PAÍS, replica los argumentos en contra del evento que ya recogía el recurso previo firmado por el partido en junio. A saber: que un gran premio que se celebrará anualmente cada diez años no puede operar con una licencia temporal, pues se trata de una cita permanente; que el trámite de información pública fue insuficiente, porque la documentación estaba incompleta; que el proyecto debió haber sido sometido a una evaluación ambiental más exigente, pues tendrá un importante impacto acústico en el vecindario y afectará a 700 árboles; y que la construcción del circuito afectará “ilegalmente” a la vía pecuaria “Vereda de los Leñeros”.
Asesinos en serie, mafia, romance, comedia y terror. Las propuestas que traen las plataformas en octubre son numerosas y variadas. Diez series españolas, entre estrenos y nuevas temporadas, verán la luz antes de que termine el mes. También, la serie italiana de Giuseppe Tornatore que llevaba 40 años inédita, la precuela de It o nuevas entregas de varios éxitos de Netflix.
AnimalEstreno. Día 3 en Netflix.ZoomersEstreno. Día 3 en Amazon Prime Video.NailsEstreno. Día 6 en SkyShowtime.RevivalEstreno. Día 6 en Syfy.La jueza LewisEstreno. Día 7 en Filmin.ReclutasEstreno. Día 9 en Netflix.La empresa de sillasEstreno. Día 13 en HBO Max.FearEstreno. Día 14 en Filmin. Asesinato en la familia Murdaugh Estreno. Día 15 en Disney+.Mentes brillantesSegunda temporada. Día 15 en Movistar Plus+.LazarusEstreno. Día 22 en Amazon Prime Video.El monstruo de FlorenciaEstreno. Día 22 en Netflix. Pequeños desastresEstreno. Día 23 en HBO Max. Mix TapeEstreno. Día 25 en Movistar Plus+. Talamasca: La orden secreta, de Anne Rice Estreno. Día 27 en AMC+. El misterio de Cemetery Road Estreno. Día 29 en Apple TV+. Mayor of Kingstown Cuarta temporada. Día 30 en SkyShowtime. Navy: investigación criminal 23ª temporada. Día 30 en AXN.RespiraSegunda temporada. Día 31 en Netflix. Dime tu nombreEstreno. Día 31 en Amazon Prime Video.Consulta el resto de las fechas de estrenos y regresos en nuestro calendario de seriesEl plan anunciado el lunes en Washington por Donald Trump y Benjamín Netanyahu para poner fin a la guerra de Gaza debe ser recibido como una oportunidad desesperada, un mínimo resquicio para detener la matanza que se ha cobrado ya la vida de más de 66.0000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños. Su redacción unilateral, sin plazos ni garantías claras y que además ningunea a los palestinos como interlocutores, convierte el texto en un ultimátum. La única condición concreta inmediata es que Hamás entregue a los rehenes israelíes en 72 horas. En otras palabras, impone a la organización islamista la rendición incondicional. No es una hoja de ruta hacia la paz, pero la urgencia del horror exige darle una oportunidad porque pondría fin a la guerra inmediatamente.
La noche de la dana, miles de valencianos se encontraron con un miedo que traían aprendido de la niñez, cuando otras riadas nos enseñaron que la devastación se instala en el imaginario de varias generaciones. Aquellos que eran jóvenes y no lo pudieron vivir escucharon igualmente, en historias que pasaban de abuelos a nietos, de padres a hijos, los efectos de las inundaciones del Turia o del Júcar, o crecieron —crecimos— entre adoquines que aún rememoran hasta dónde llegaron las aguas del 57. O de la pantanada del 82, que dejó afectados que se acostumbraron a dormir con la mano tendida al suelo por si el río se presentaba al pie de sus camas. Así lo hicieron durante años, aunque vivieran en un tercero.
Este lunes se anunció que la editora de videojuegos Electronic Arts pasaba a manos de un grupo de inversores encabezado por un fondo de inversión saudí y participado por Jared Kushner, yerno de Donald Trump, por casi 47.000 millones de euros. EA, como se la conoce, es la editora de la mayor franquicia de juegos de fútbol del mundo (que, tras la pérdida de la licencia de la FIFA, ahora intenta hacerse conocer por otro nombre) y de otros videojuegos como Battlefield o Los Sims. “Los Sims empezaron como un comentario sobre el capitalismo”, recordaba una usuaria en Bluesky. “A lo que hemos llegado”.
Por su discurso de apertura en la Asamblea General de las Naciones Unidas el pasado 23 de septiembre, en Nueva York, Luiz Inácio Lula da Silva ha sido aclamado como estadista. Para muchos, ha sido el mejor que ha pronunciado en la ONU. Es cierto que Lula hizo una declaración fuerte contra el genocidio que Israel está cometiendo en Gaza y se posicionó con firmeza y corrección en varios puntos, haciendo una defensa enfática del multilateralismo. Sin embargo, dedicó menos de 3 de sus 18 minutos a la amenaza que pone a la especie humana en peligro de extinción. A menos de dos meses de la COP30, la primera Cumbre del Clima que se celebrará en la Amazonia, el presidente del país que la acoge mencionó el colapso climático solo de forma protocolaria. Ya no estamos en el mundo en que se creó la ONU, eso está claro. La cuestión que se impone es qué significa ser estadista cuando ya hemos perdido la posibilidad de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados y vivimos con olas de calor cada vez peores y fenómenos climáticos cada vez más extremos.